Blogia

EL ANTIGUO BLOG DE CALLUS

Shock Waves (1978) - Ken Wiederhorn

Shock Waves (1978) - Ken Wiederhorn

Si en una película nos encontramos con zombies, nazis, rodada en los 70 y con actores de la categoría de John Carradine y Peter Cusing, pensaremos (o al menos yo) que estamos ante algo grande. Una de esas películas poco conocidas pero tremendamente entretenidas y disfrutables. Pues no. Es una pena que se hubiera desaprovechado todo esto.

La historia nos cuenta las vicisitudes de un grupo de veraneantes que llevan a cabo un viaje en el desastroso barco comandado por un viejo capitán (John Carradine). En una oscura noche, tienen un encontronazo con los restos de otra embarcación, lo que les obliga a buscar refugio en una isla cercana. Ésta, que en principio parece deshabitada, tiene un residente. Se trata de un antiguo comandante nazi (interpretado por Peter Cusing). Él les insta a irse pero el grupo de supervivientes no le hacen caso. La isla cuenta, entre su vegetación, con un grupo de soldados nazis que durante la guerra fueron objeto de un experimento para convertirlos en armas perfectas de matar y que residen bajo el agua. El problema es que este grupo fue creado con lo peor de la sociedad: asesinos, psicópatas, …por lo que eran (y siguen siendo) imposibles de controlar. Así, los supervivientes tendrán que preocuparse de más cosas además de salir de la isla.

Como comentaba al principio, me imaginaba que iba a poder disfrutar de una gran película de esas que se hacían en los 70, pero no fue el caso. Esta película es aburrida hasta el exceso. Durante gran parte de su duración (casi toda) no pasa nada. Todo se reduce a los protagonistas corriendo de un lado sin ruta ni rumbo y a ver asomarse a los nazis del agua.

El guión es malo, no cuenta casi nada y lo que nos relata tiene poco sentido. Los protagonistas no están lo suficientemente definidos así, por ejemplo, hay personajes que no sabes si son pareja o simplemente compañeros de viaje.

Los actores hacen lo que pueden pero claro, con semejante guión, no se puede conseguir mucho. Por poner un ejemplo, el papel de Peter Cusing  consiste en unas pocas líneas de diálogo avisando a los del barco del peligro y después correr de un lado para otro por toda la isla. Claro que el resto de protagonistas tampoco es que hagan mucho más que el pobre Peter.

Los asesinatos tardan en llegar y son muy contenidos (prácticamente podemos decir que se omiten). Las escenas en las que se ve salir a los nazis del agua, están muy conseguidas (da “acojone” ver salir a todos estos arios en formación del agua) aunque llegan a aburrir debido a la cantidad de veces que se producen estas apariciones.

Y poco más se puede decir de esta cinta. Mucho correteo, poca muerte y poco diálogo. No obstante hay que comentar que, con todo lo malo que tiene, es muy superior a la posterior “El Lago de los Muertos Vivientes” de Jean Rollin aunque esta última es más graciosa por el cutrerío general y por la gran cantidad de epidermis femenina que podemos disfrutar.

Como curiosidad decir que la protagonista (aunque su papel es tan simple y vacío como los de los demás) es interpretada por Brooke Adams, la célebre novia de John Smith en la gran película “La Zona Muerta” de David Cronenberg.

PUNTUACIÓN FINAL: 3,5

 

Trailer película


 

La Llorona / The Wailer (2006) – Andrés Navia

La Llorona / The Wailer (2006) – Andrés Navia

La llorona es una de las leyendas más conocidas en Iberoamérica. Según el país, la historia presenta variantes. Las más curiosas, para mí, son la de La Tulivieja panameña, fábula que trata de aleccionar a las jóvenes sobre lo malo que es irse de juerga así como la de la María guatemalteca, que quedó embarazada de un hombre que fue a su casa a realizar un arreglo (la célebre historia del fontanero de las películas eróticas de los 70). En cualquier caso lo esencias es que se trata del espíritu de una madre que se lamenta por sus hijos perdidos. También quiero señalar que en 1961, el director mexicano Rafael Baledón realizó una gran película sobre el tema (adaptándolo libremente) titulada “La Maldición de la Llorona”.

La que nos ocupa hoy es, lógicamente una adaptación de la célebre leyenda. Una  mujer mata a sus hijos pensando que un joven, al que desea, no la quiere por culpa de ellos. Cuando él se entera de lo que ella acaba de hacer, la rechaza. Discuten y en medio de la refriega, ella muere. Tiempo después se nos presenta a los seis típicos anormales jóvenes norteamericanos que se encuentran en México en viaje de placer (como decía Ang Lee “Comer, Beber, Amar”). Están desesperados ya que no encuentran alojamiento. De repente un hombre les ofrece una casa en medio del bosque junto a un lago (sí, la de los hechos anteriores). Será su peor elección.

La película no aporta nada interesante. En el fondo no es más que una mezcla entre “Posesión Infernal” y cualquier película de serial killer pero con menor presupuesto que otras del género.

La mayoría del tiempo lo que vamos a ver es a los seis jóvenes haciendo el tonto. Que si estamos bebiendo, que si nos drogamos, que si enseño las tetas (bueno, esto último no está tan mal).

Aviso, antes de que me olvide, que a partir de aquí puede haber (y de hecho hay) SPOILERS por lo que si alguien no quiere que le destripe esta “gran obra”, que pare aquí y no siga leyendo.

El guión es totalmente absurdo y lleno de incongruencias. Por ejemplo, cuando Juan, el hombre que les alquila la casa, se la está ofreciendo, hay un borracho que les comenta a los protagonistas que tengan cuidado con La Llorona. Durante el trayecto hasta el lugar, Juan les cuenta la leyenda. Posteriormente nos enteramos que el hombre que deseaba La Llorona había escondido los tres cuerpos en la casa por lo que, ¿cómo pueden saber en el pueblo la leyenda si no aparecieron los cuerpos? O ¿es que el joven confesó pero a las autoridades les dio pereza enterrar los restos?

El mal se desata por algo tan tonto como que el personaje (más) repelente –el que interpreta el negro- se pone a hacer el tonto con un espejo que contiene encima un pequeño altar que tapan la pared donde están los cadáveres. Vamos a ver, tienes a una chica bastante atractiva casi desnuda en cama provocándote activamente y te pones a jugar con un espejo. Mira, además de repelente eres idiota.

Más tonterías. La pelea entre dos de las chicas. Una le ofrece a la otra un poco de coca para que la esnife  y ésta la rechaza. Sin venir a cuenta se arma un jaleo entre ellas que ni aporta nada a la historia ni tiene tampoco ningún sentido.

A raíz de este enfrentamiento, una de las chicas se va enfadada y la sigue el garrulo que se la quiere beneficiar (los otros cuatro son ya parejas). El caso es que le da conversación mientras no deja de tirarle los tejos. Le dice que los demás son muy enrollados aunque tomen drogas, cosa que él no hace. Sin embargo, posteriormente se le ve fumándose un porro. Es verdad que para camelarse a una joven dices mil mentiras pero aquí es el protagonista masculino principal (dentro de los tres del grupo) por lo que considero que se trata más de un fallo de guión que de rollo para ligar.

Comentar que una vez se ¿activa? la maldición, los protagonistas tienen miedo a salir de la casa ya que en el exterior hay una oscuridad anormal. Hasta aquí todo perfecto. Lo que no se entiende es que le tengan tanto pánico a salir y después una de ellas se ponga de espaldas pegada a la ventana (que poco antes rompieron). Lógicamente, La Llorona, que será mala pero no tonta, agarra por los pelos a la chica y se la lleva. Pero la cosa no acaba aquí, ya que, posteriormente, el protagonista hace lo mismo pero esta vez en la puerta y claro, vuelve a ocurrir lo mismo aunque esta vez no funcione adecuadamente.

Por cierto que el que les alquila la casa dice que tiene no sé cuantas habitaciones, y después es una especie de apartamento de playa con un par de dormitorios, una habitación para trastos, cocina y servicio. Vamos que seis estarían bastante justos.

Otra escena graciosa (¿Cuántas van?). La pareja protagonista corre por el pasillo de la casa (similar al que, en mi piso, lleva de la puerta de entrada a mi habitación, es decir, que no tiene más de 3 metros). Él entra en la habitación del final (el trastero) pero cuando ella está casi dentro queda atrapada por la puerta mientras se acerca, lenta, muuuuy lentamente, la mala. La coña es que, por la postura de la chica, se ve que perfectamente podría entrar en la habitación pero no lo hace. Para intentar justificar esto, comentan algo de un rosario, que estaba en el altar y que perteneció a La Llorona, que la chica lleva en la mano y que, en teoría, les protegía (en plan, si en la cama me tapo con la manta estoy protegido de cualquier mal). Otra cosa que no entiendo es que, al principio, un niño le hace un dibujo a la protagonista y, en él, aparece con esa joya puesta (no llegan a decirnos nada más sobre esto).

Los actores son nefastos. Quizás la protagonista principal es la más aceptable (que no buena). Especialmente odioso es el personaje del negro (¿cuándo dejarán de poner al imbécil chistoso en este tipo de películas?) con su especie de rap cutre de “salchichas crudas, salchichas cocidas,…” y su sobreactuación.

Técnicamente decir que las muertes nunca se ven. Podemos apreciar como son atrapados por el maléfico ser y después los devuelve destrozados. No obstante, los maquillajes de los muertos están bastante bien hechos siendo quizás lo mejor de la película.

Tampoco se salva la banda sonora. Hay una escena en la que está todos metidos en una especie de piscinilla natural en la que no deja de oírse un machacón “bum, bum, bum” auténticamente molesto.

En resumen, es una de estas películas te vas viendo mientras esperas que ocurra algo interesante y, cuando te das cuenta, termina. Es mala, no aporta nada nuevo al género y tampoco adapta bien lo ya existente. Actores cutres, música mala y muertes inexistentes (al menos explícitamente). Puede verse pero no es recomendable.

Como curiosidad, decir:

1º) Yo la vi en español neutro y tiene un penoso doblaje (no porque esté en neutro si no por elección de las voces, sincronización con los labios, entonación,…) así que mejor verla en versión original.

 2º) Que acaba de salir la segunda parte (no me preguntéis quién fue es inocente que se la produjo).

3º) Que, a partir de ahora, voy a empezar a poner una puntuación entre 1 y 10 a las cintas. No es una forma de opinar que me apasione pero creo que, con tanta mala película, se hace necesario.

PUNTUACIÓN FINAL: 3

 

Trailer Película

 

La Maldición del Charro (2004) – Rich Ragsdale

La Maldición del Charro (2004) – Rich Ragsdale

Cuando vi el título de esta producción norteamericana me imaginé que me encontraba ante otra de esas películas directas a dvd que, sin aportar nada nuevo al género, te permiten gozar de un rato entretenido. Nada más lejos de la realidad.

La cinta trata sobre una chica llamada María, cuya hermana se suicidó recientemente, que decide hacer un viaje de placer con su compañera de habitación de la universidad y un par de chicas más. Durante este viaje comienza a tener visiones de su hermana advirtiéndole que el Charro está llegando. Cuando alcanzan su destino, una casa en medio del bosque, el ser comenzará con su carnicería.

Si hace unas semanas comentaba que “Cena con el Vampiro” era mala, ésta, en comparación, es horrorosa. Por lo menos la otra podía verse aunque fuese una estupidez pero no te dejaba esta sensación de haber perdido casi hora y media de tu vida. Voy a destripar casi toda la historia pero creo que con ello hago un gran favor a la humanidad. No obstante, el que no quiera que le explique la “profunda trama” (jia, jia) es mejor que pare aquí. 

Tú estás delante de la pantalla espera que te espera y no ocurre nada relevante o mínimamente interesante. Esto me trae a la memoria un famoso monólogo en el que comentaban lo del fanático de las películas de Clint Eastwood que va a ver “Los Puentes de Madison”: “Venga Clint, pégales un tiro. Venga dale un puñetazo a alguien. Coño Clint, vuela por lo menos un puente”. Pues aquí pasa lo mismo.

A medida que pasa el tiempo ves un montón de escenas de relleno que no aportan nada. Por ejemplo, ¿Qué tienen que ver las escenas del bar de carretera con el resto de la historia?

Además, una película de terror, salvo que sea de las de tipo psicológico, debe tener alguna muerte durante la primera media hora. Aquí nos encontramos con que en los primeros 50 minutos no hay nada de nada (exceptuando el suicidio de la hermana de la protagonista).

Para colmo, las chicas son todas unas pedorras (las de la película, no en general). La que interpreta el personaje principal además de ser fea y una aguafiestas, es medio corta, y se pasa toda la película gimoteando. Su compañera de habitación parece que está todo el tiempo hasta las orejas de tripi ya que siempre tiene una risa tonta en los labios. La negra guarrona es insoportable además, que será muy guarra y todo lo que quieras pero no llega a enseñar ni una triste teta. Por último está la gótica que únicamente es de relleno. A todo esto hay que añadirle los típicos “maxos” que ellas conocen en un bar, y que lógicamente llevan a su casa (como debe hacer toda chica que se precie, con un total desconocido).

Las interpretaciones son patéticas aunque con semejante guión, no luciría ni Meryl Streep. Se pasan todo el tiempo diciendo chorradas sobre lo que van a follar, lo que bien que se lo van a pasar y cosas similares, gritando como energúmenas. Por cierto que salvo una “limpieza de sable” que le hace la negra al sheriff para evitar que las detengan (aunque después ella lo niegue) y un magreo en la ducha de la gótica (con una escena lésbica sin venir a cuento y muy corta), de sexo nada.

En un momento dado, nos comentan el origen de la maldición por la cual el malvado ser persigue a María y anteriormente a su hermana (aunque esto no lo deja del todo claro). Al parecer, el Charro era un malvado que se enamoró de una virginal doncella. Cuando quiso casarse con ella, ésta le rechazó. El hombre todo enfadado mató a sus hermanas (de ella) y cuando iba a acabar con su vida (de ella, otra vez) fue capturado por los vecinos del pueblo que lo colgaron de un árbol. Antes de morir echó una maldición a todos los descendientes de la muchacha.

Vamos a ver, ¿no hubiera sido más fácil que se vengara de ella inmediatamente después de morir y no esperar un montón de años para tomar venganza? Además, comprendo que vaya tras la protagonista pero, ¿qué culpan tienen los demás? ¿Qué culpa tiene la ex-novia de uno de los “maxos”? Ninguna, sin embargo se le pone delante del coche para que cuando la chica se baja a increparlo, poder cortarle la cabeza.

Las muertes son muy rápidas (en los últimos 20 minutos), poco imaginativas y con poca sangre.

No comenté que El Charro es un hombre con un poncho y un sombrero cordobés, una máscara de las de carnaval (que gracias a Dios no se ve mucho) y una especie de machete con el que da tormento. Bastante ridículo.

Otro personaje que aparece un par de veces, pero que tiene cierta importancia al final, es un mozo barbudo que se le aparece de vez en cuando a María, y que al final resultará ser un ángel. Terrible la escena final en la que sale con una alitas como Claire Danes en “Romeo y Julieta”.

Lo único bueno que tiene esta película lo encontramos en el momento en que se muestra la historia del malo que lo hace a modo de película muda pero lo fastidia, contándolo al mismo tiempo mediante voz en off en plan: “por si alguien viendo las escenas y leyendo los cartelillos no se entera de lo profundo de la historia”.

En resumen, una de las peores películas (o la peor) que llevo vistas en casi un año de blog. Es aburrida, con malo chorras, chicas nada agraciadas y muertes simples. No se os ocurra perder el tiempo con este engendro.

Days of Darkness (2007) - Jake Kennedy

Days of Darkness (2007) - Jake Kennedy

Es curioso que últimamente abunden tanto las películas de zombies. No sé si será porque se trata de un subgénero que gusta especialmente a la gente (por lo menos a mi me encanta) o es que son las más baratas de hacer. En cualquier caso, la mayoría son bodrios hechos con cuatro duros que no aportan nada novedoso. Yo las suelo comparar con las películas de acción que se hacían en los 80. En éstas el protagonista era un macho (dígase “maxo” que suena más varonil) hipermusculado entrenado en las fuerzas especiales que peleaba contra unos terroristas que siempre secuestraban una central nuclear, o eléctrica o una base militar (lo importante es que estuviera llena de tubos y pasillos interminables). Pues sustituid los terroristas por muertos vivientes, el maxo por un grupo de personas de la calle, mantened el decorado y…BINGO… ya tenemos una película de zombies. No obstante, dentro de este tipo de subgénero, las hay mejores y peores. La que nos ocupa es de las más pasables.

En “Days Darkness” se nos cuenta como un cometa de pasa cerca de la Tierra, deja un resto que cae en forma de meteorito. Mientras esto se produce vemos a una pareja de enamorados que están haciendo camping cerca de unas antiguas instalaciones del gobierno (americano, por supuesto). A la mañana, la chica empieza a encontrarse mal por lo que deciden regresar a su casa. Mientras van en el coche, se cruzan con una persona toda llena de sangre dando tumbos por el medio de la carretera. El protagonista se baja para ayudarle pero el herido, que es un zombies (lo digo para quien no lo hubiera supuesto ya), le ataca, mordiéndole en un brazo. Entonces comienzan a aparecer más. En el último momento la pareja será salvada por un joven que, machete en mano, dará buena cuenta de los infectados. Después de esta pelea, les indica que lo sigan con su auto. Así llegan a una especie de búnker donde se están refugiando otros supervivientes.

Casi toda la acción se va a desarrollar dentro del búnker. Lo que vamos a ver son, fundamentalmente, los conflictos que surgen entre las distintas personas encerradas. Nos encontramos con personajes bastante típicos de este tipo de producciones. Aquí son: el malo que es un cobarde pero tiene el único arma de fuego, el protagonista que es el bueno y el que lo soluciona todo, su novia que está embarazada a pesar de ser virgen lo que motiva que su pareja le rechace no creyéndose lo de la virginidad, el hombre que salvó a la pareja que también tiene su propio secreto, la chica entrenada en el ejército que es la cabal del grupo, un negro y su compañero, vendedores de coches, que proporcionan el toque de amistad, una actriz porno con su hija adulta virgen (otra más, lo que demuestra que estamos hablando de ficción) que no quiere que pase por lo mismo que ella, un loco totalmente obsesionado con la Biblia y su hermano infectado.

Creo que no destripo nada de la historia si comento que la infección (ya que no son zombies al uso) es el resultado de una extraña forma de vida que venía en el meteorito. Así vamos viendo como a medida que pasa el tiempo, los protagonistas van encajando las diferentes piezas que explican la causa de la misma.

Aunque la historia es casi toda en un lugar cerrado, no se hace nada aburrida. Además, las pocas escenas de acción existentes, están bastante más logradas de lo esperado en este tipo de producciones.

Los actores, no son conocidos pero su interpretación el bastante creíble, especialmente la que hace de actriz porno que quizás el personaje más simpático e interesante.

Los efectos especiales son escasos pero bastante logrados. Hay una escena en la que se ve un extraterrestre que, para evitar que quede cutre, se desarrolla con una luz intermitente.

Quizás donde flojea algo es en el final demasiado rápido y un poco sin sentido así como varias cosas que quedan medio explicadas.

Conclusión, sin destacar especialmente por nada, cumple más que sobradamente como película de zombies. Entretiene y no parece excesivamente pobre. A estas alturas ya visto casi todo lo que se podía decir sobre el tema, no se puede pedir más.

Trailer película

Cena con el Vampiro (1988) – Lamberto Bava

Cena con el Vampiro (1988) – Lamberto Bava

La falta de vergüenza es quizás la característica más destacable del cine italiano de terror y ciencia ficción. Nadie como los productores italianos (bueno, quizás los turcos pero eso ya es otro cantar) para plagiar, con cuatro duros, cualquier gran éxito del cine americano. Durante los setenta y ochenta no había película exitosa que no tuviera su copia italiana eso sí, disfrazada con nombres americanos que escondían profesionales (y no tanto) del país mediterráneo. Reconozco que yo, en aquellos primeros tiempos de VHS, alquilé y disfruté de muchas de estas “joyas”. Es más, actualmente todavía gozo visionando gran parte de ellas. Por eso cuando me decidí a ver “Cena con el Vampiro” pensé que sería otra de esas adorables y casposas producciones de los 80. Nada más lejos de la realidad.

Aquí un grupo de personajes, tres chicas y un chico, son seleccionados en un casting que realiza Yurek, un famoso director de cine de terror, para elegir a los protagonistas de su nueva película. Al acudir al lugar en el que reside dicho director, un castillo en medio del campo, se darán cuenta de que se trata de un vampiro. Durante la cena, Yurek les hará una propuesta sorprendente: tienen hasta el amanecer para acabar con él o serán ellos los que pasarán a mejor vida.

Mientras la veía pensaba que el que escribió el guión debía de estar hasta las trancas de cazalla mientras lo hacía porque la historia no tiene lógica ninguna. Pensaba, además, que hubiera sido un buen guión para una película de Parchís u otro grupo infantil de los años 80. Salvo por las canciones, el comportamiento de los protagonistas es del estilo del que demostraban los repelentes niños de las películas infantiles. Ya lo comentaré en profundidad más adelante.

Ya en la primera escena un equipo de rodaje de principios del siglo XX, que están filmando una película, encuentran al vampiro y, como ocurre siempre, alguien se corta y con esa sangre el ser revive. Lo curioso es que en vez de escapar, se quedan allí mirando como despierta y acaba con sus vidas.

Acto seguido pasamos a la época actual (los 80) y vemos a un grupo de gente esperando en la puerta de un teatro para poder acceder a un casting. Aquí es donde nos presentan a los protagonistas (que por cierto están todos en primera fila para entrar y son los únicos que hablan durante la espera). Hay una cantante, una bailarina, una actriz y un humorista (el graciosillo suele ser insoportable en la mayoría de las películas pero en esta se lleva la palma).

La prueba ya es el despiporre porque vamos a ver, ¿para qué narices quiere un director de cine de terror a una bailarina, una cantante y un humorista? Especialmente graciosa es la prueba de la bailarina. Lo único que hace es improvisar saltando y moviendo las manos a la manera de los 80 (¡qué tiempos!). También podemos disfrutar de la cantante con la típica tonadilla de la época y a la actriz representando un fragmento de Romeo y Julieta. Lo que no recuerdo es lo que hizo el humorista (igual lo olvidé como suele ocurrir con los traumas como accidentes y cosas por el estilo). Todo está dirigido por un malvado productor de los de pelo engominado.

Los seleccionados son recogidos días después para dirigirse al castillo donde reside el director. Aquí es donde aparece otra figura que no puede faltar en cualquier película con castillo que se precie, que es la del jorobado a lo Marty Feldman. Éste se dedica a hacer tonterías y comentarios supuestamente graciosos (o se me está agriando el carácter o maldita la gracia que tenía el buen hombre).

Por último señalar que aparecen dos personajes más, el vampiro y su compañera. El vampiro está interpretado por George Hilton (realmente Jorge Hill Acosta), actor más que solvente muy habitual en los giallos de la época como “La Perversa Sr. Ward”, “La Cola del Escorpión” o “Sumario Sangriento de la Pequeña Estefanía” para el que suscribe, una de las mejores producciones de su género. Y para redondear una chica que parece que también es vampiro, que tiene poderes y ciertos comportamientos lésbicos pero que al final ni es vampiro, ni es lesbiana ni nada que se le parezca. Muy raro todo.

Una vez que Yurek les plantea el reto, el resto de la película es una sucesión de carreras de los protagonistas arriba y abajo por todo el castillo. El esquema es: se encierran en una habitación – hablan un poco – aparece el vampiro (Buhhh) – corren por los pasillos – se encierran en otra habitación.

Por el medio podemos “disfrutar” de toques de comedia propia de película infantil. Así, en un momento una de las protagonistas le pega una patada en sus partes al vampiro quedando éste medio encogido, en otro momento otra de las chicas le mete una cinta de video en la boca que le queda atrapada entre los colmillos, … como podéis apreciar algo totalmente jocoso. Aquí es donde sientes auténtica pena del pobre de George, tener que acabar en esto.

También son especialmente graciosos los comentarios del chico durante la cena cuando se les da a conocer la naturaleza vampírica del dueño del castillo (auténtico festival del humor, vamos).

El final es de órdago con un grupo de monstruos que casi no se ven pero se vislumbran unas caretas propias de chino de la esquina.

Las interpretaciones son todas patéticas. Incluso George Hilton parece que no se llega a creer en ningún momento su personaje. Las actrices no están mal pero no enseñan ni pizca de chicha (otro punto negativo).

Lo único destacable de toda la cinta es la escena en la que matan al productor cuyo momento gore contrasta con todo lo light que es la película el resto del tiempo.

En resumen, parece mentira que se llegara a producir tal engendro. Yo siempre critico el cine de terror de Lucio Fulci pero comparado con esto es auténtica gloria. Por lo menos sus películas poseen cierto toque onírico bastante logrado. Aquí, ni hay terror, ni gore (sacando una escena), ni hay comedia, ni hay sexo, ni hay nada de nada. Llama la atención que el artífice de esto sea Lamberto Bava que, aún siendo un director bastante malo, tiene las dos partes de “Demons” que eran perfectamente disfrutables. Esta película no. Abstenerse de ella salvo la gente que eche de menos las aventuras de Parchís.

Ouija (2007) – Topel Lee

Ouija (2007) – Topel Lee

Cuando me decidí a ver esta película pensé que se trataba de otra de las tantas americanadas de terror que salen directamente a dvd todos los años. Me llamó la atención la gran cantidad de apellidos hispanos que salían en los títulos de crédito pero mi sorpresa fue mayúscula cuando me di cuenta que estaba ante una producción filipina. Actualmente sorprende la gran cantidad de cintas de terror producidas por países del otro lado del mundo. Así, abundan las australianas, de Hong Kong, Tailandia, Corea y sobre todo de Japón. La mayoría no son más que vueltas de tuerca a las mismas ideas con mayor o menor presupuesto y con mejor o peor fortuna.

En “Ouija” nos encontramos con la enésima película de fantasma infantil pálido, con pelo largo y con la curiosa costumbre de flotar desde el techo.

La historia nos cuenta como 4 niñas hermanas dos a dos y primas por parejas (buff), realizan una sesión de ouija en una playa. Cuando la cosa empieza a ponerse mal aparece su abuela, que es medio bruja, y soluciona el problema.

20 años después las cuatro vuelven a reunirse como consecuencia del fallecimiento de la abuela. La noche del funeral, deciden llevar a cabo otra sesión de ouija (parece ser que los filipinos no tienen otra cosa que hacer) y cuando un espíritu se manifiesta, la tabla cae al fuego dejando libre en la Tierra al fantasma. Este ser comenzará a perseguirlas para darle muerte.

La historia novedosa no es ya que la ouija es una excusa como cualquier otra para que se manifieste el ser incorpóreo y les dé caza. El problema del guión es que a partir de los primeros 15 minutos, que son bastante interesantes, el resto de la cinta se vuelve muy repetitiva con una sucesión de persecuciones similares sin que prácticamente haya ningún asesinato. El esquema es siempre: chica sola – fantasma se manifiesta – chica escapa.

El presupuesto es bastante reducido lo que repercute en los efectos especiales que se reducen a maquillaje, colgar al fantasma del techo y poco más. No es que yo sea de los que aman los FX por encima de todo pero en una película de terror de este tipo suelen ser bastante relevantes.

Por otra parte la fotografía es bastante sucia y poco acertada. Casi parece hecha por un novato.

Las actrices cumplen bastante bien y son, sin duda lo mejor de la película. Únicamente me disgustó un poco la que hace el papel de Romina (Jolina Magdangal) ya que es la típica modosita que nunca rompió un plato (aquí quizás el problema sea más del papel que de la actriz). En un sentido más estético, decir que hay dos, la que hace de Sandra (Iza Calzado) y, especialmente, la que interpreta el personaje de Ruth (Rhian Ramos), muy atractivas con ese toque exótico que poseen las mujeres filipinas a medio camino entre rasgos occidentales y orientales.

Señalar un detalle que me llamó especialmente la atención. Los personajes intercalan conversaciones en los dos idiomas oficiales. Generalmente hablan inglés los que parecen de clase más alta o más cosmopolitas (como el médico o la abogada de éxito) y el tagalo se reserva para conversaciones más familiares o para la gente de la isla.

Poco más puedo comentar de esta producción que lo que hace es trasladar toda la iconografía del cine fantasmal japonés de los últimos años a Filipinas. Se deja ver pero sin aportar nada especial al género.


 

Trailer película

Pirates of Ghost Island (2007) – Mitch Toles

Pirates of Ghost Island (2007) – Mitch Toles

Generalmente el público suele escapar como alma que lleva el diablo, de las pequeñas producciones. No hablo de las series B sino de esas producciones realizadas por varios amigos con cuatro duros. El problema de estas películas es que no disponen de un director famoso, ni de actores conocidos ni, desde luego, de grandes efectos especiales con los que impresionar a los espectadores. No obstante, algunas pueden presumir de contar con guiones solventes que permiten que su visionado sea muy disfrutable. No obstante esto sólo ocurre en unos pocos casos y “Pirates of Ghost Island” no es uno de ellos.

Esta cinta nos intenta contar la historia de un grupo de jóvenes que tras haber acabado sus estudios deciden hacer un crucero (que nunca se llega a ver). Extrañamente, y sin que nos lo aclaren adecuadamente en ningún momento, aparecen en la playa de una isla desierta en la que habitan una serie de fantasmas (fundamentalmente de piratas) como consecuencia de una vieja maldición.

Hasta aquí puedo contar de la historia porque el resto es totalmente confuso. Parece ser que una de las protagonistas es la reencarnación de la novia del capitán pirata que quiere acabar con sus vidas, y de vez en cuando pasa de ser Sarah, la chica actual, a Liza, la terrible pirata.

Todo es muy absurdo y sin sentido en la película. Los diálogos son muy abundantes y aburridos aunque no aportan nada a la historia. Explicaron un montón de veces el porqué de que aparezcan los fantasmas de los piratas pero cada vez hablaban de cosas diferentes con lo cual no había manera de aclararse. También aparecen otros fantasmas como el de un conquistador español, un japonés de las 2ª Guerra Mundial o un marinero americano entre otros. Estos personajes son totalmente absurdos, especialmente ridículo es el japonés ya que canta a la legua que se trata de un hombre blanco con una cinta en la cabeza para disimular.

Los actores son malísimos sobreactuando todo el tiempo y sin saber muy bien qué hacer ni dónde ponerse en cada escena. Especialmente horrible es la interpretación de una rubia que se pasa todo el tiempo en bikini y que parece que tiene algún tipo de deficiencia mental (ahora eso si, no está mal de todo).

Los efectos especiales son ínfimos. Unas luces azules indicando cambios de dimensión (o algo así) y pintura roja en grandes cantidades.

Las muertes son sin sentido y poco imaginativas. Al primero en morir le lanza un nativo un dardo con una cerbatana y cuando se gira tiene más de cuatro enganchadas en la cara que acaban con su vida con una abundante ración de sangre. Exagerado totalmente. Otro especialmente gracioso es el que mata el japonés ya que lo ve venir con la catana en la mano con gesto agresivo y el chaval no hace nada, simplemente se queda mirando como se acerca y le pega el tajo. Por cierto, que después de alguna muerte los que quedan hacen chistes sin gracia y totalmente fuera de lugar.

En resumen, bodrio propio de fiesta de fin de curso con mal guión, pésimas actuaciones, muertes tontas y encima salen mujeres que no enseñan nada. Es decir, verla es perder el tiempo. Parece mentira que haya gente que invierta dinero en estas cosas.

Silent Hill (2006) - Christophe Gans

Silent Hill (2006) - Christophe Gans

Tengo un amigo que varias veces me comentó que siempre opinaba sobre películas que no me gustaban. Bien, eso no es del todo cierto. Es verdad que me da bastante pereza escribir sobre los grandes títulos del género (más que nada porque están más que analizadas en miles de sitios y por mejores críticos que un servidor) pero si comento películas malas es, fundamentalmente, porque son las que me cuadra ver. Pues para darle la contraria, hoy voy a hablar de un título que me encantó, “Silent Hill”.

Con respecto a esta película mi opinión puede que no sea objetiva al 100% (¿Cuál lo es?) ya que soy un fanático de los videojuegos en los que se basa. Haciendo un poco de memoria he de decir que “Silent Hill” fue el primer juego que probé (y pude terminar) cuando me compré la PlayStation. Este título aunaba un conjunto de grandes cualidades que lo convirtieron en un clásico: una interesante trama, unos monstruos aterradores, unos personajes atrayentes, esa niebla perpetua que le proporcionaba un aura de irrealidad (más tarde me enteré que se había hecho porque la consola no podía mover fluidamente sus gráficos sin ella) y, sobretodo, la impresionante banda sonora. En resumen, me encantó.

Tras esta llegaron 3 partes más para la siguiente consola de Sony (y otras plataformas) las cuales también me acabé  (bueno, la cuarta parte no porque traiciona bastante el espíritu de la serie). Actualmente estoy, en el poco tiempo libre del que dispongo, con la precuela para PSP.

La película nos cuenta la historia de una pareja cuya hija adoptada Sharon, es sonámbula. La niña se levanta por la noche y anda sin rumbo mientras va gritando el nombre de Silent Hill. Éste, hace referencia a un pueblo que fue abandonado en el año 1974 tras un incendio que acabó con la mayoría de la población. Rose, la madre, harta de la situación en la que se encuentra la niña, decide dirigirse a dicha población, sin comentarle nada a su marido que no está a favor de ello, para averiguar por qué lo nombra.

Al parar en una gasolinera, el comportamiento raro de la cría llama la atención de Cybil, una policía de carretera. Ésta posteriormente decide seguirles y darle el alto. Cuando paran y la agente de la ley se baja de su moto, Rose aprovecha para arrancar el coche y darse a la fuga. Poco antes de llegar a Silent Hill se le cruza una niña frente al coche y, como consecuencia de ello, tiene un accidente en el que queda inconsciente. Al volver en si, su hija ha desaparecido. Junto a la agente de policía que la había estado persiguiendo, se internará en el pueblo para encontrar a Sharon.

Aunque nos encontramos ante una producción que dura 2 horas, no se hace para nada pesada. La historia está muy bien desarrollada, manteniendo el interés en todo momento. El guión esta lleno de interrogantes en cadena. Así, a medida se van resolviendo unos, surgen otros nuevos. ¿Dónde está la niña? ¿Qué relación tiene con el pueblo? ¿Cuál es el misterio de éste? ¿Dónde y por qué suena cada poco una sirena? Está claro que para la gente que como yo ya lo disfrutó en su versión videojuego, se perderá parte del encanto que supone ir descubriendo estos misterios pero para los demás será un auténtico placer. Me imagino que será más o menos lo mismo que experimenté yo cuando vi por primera vez la gran “Muertos y Enterrados”.

La ambientación es calcada a la de su referente consolero. Destaca tanto la dimensión “normal” del pueblo con la niebla continua y esa ceniza que cae como si se tratara de copos de nieve, como las paredes sangrantes y los seres que pueblan la dimensión paralela. Se nota en toda ella el especial cuidado puesto en todos los detalles.

El director es Christophe Gans, conocido por “El Pacto de los Lobos”, “Crying Freeman” así como por “Necronomicon” película compuesta por tres historias siendo la suya, la mejor. Tratándose de Gans sabemos que nos encontramos ante una persona que cuida muy mucho el aspecto visual de sus producciones. Esta vez no iba a ser una excepción. Todas las escenas están muy estudiadas tratando de trasladar la colocación de las cámaras utilizada en los juegos. 

Los actores bordan sus papeles. Destaca el personaje de Christabella, la líder del grupo de supervivientes, así como la niña (cuando interpreta el personaje de Alessa, da verdadero respeto). Quizás los que menos sobresalen, en general, son los papeles masculinos tanto el del policía como el del marido pero claro, nos encontramos ante una película centrada en mujeres (la líder, la madre, la niña, la policía,...) que son los personajes principales de la historia.

La banda sonora es realmente aterradora y sobretodo, desasosegante. Al mismo tiempo en determinados momentos tiene piezas verdaderamente bellas.

No obstante también tiene algunos pequeños defectos. Los primeros 15 minutos son calcados a los de la primera parte de la versión de consola sustituyendo al protagonista principal que era un hombre, por una mujer. Esto no es del todo malo pero podrían haber elaborado algo que fuera original y no copiar todo ese principio. Tampoco me acaba de gustar la fotografía que es demasiado clara en contraposición con lo sucia que es en la versión jugable.

En resumen, es difícil opinar “desde fuera” sobre algo que te encanta en cualquiera de sus formas. Para mí, además de ser la mejor adaptación de un videojuego al formato cinematográfico, es una gran película de terror que creo que se convertirá con los años, en un auténtico clásico. Se habla de que el año que viene se rodará una segunda parte. Esperemos que si no mejor, por lo menos mantenga la calidad de ésta. Totalmente recomendable.  

 

Trailer película